Lear, el rey y su doble es una poderosa y despiadada reinvención del clásico shakespeariano, donde la decadencia del cuerpo se confunde con la ruina de un reino, y la vejez se convierte en un campo de batalla lleno de ironía, delirio y verdad. En esta versión contemporánea y visceral escrita por Flavia Radrigán, el monarca Lear se enfrenta a su propia sombra, atrapado entre la culpa, el deseo, la memoria y la senilidad.
El escenario no es un castillo de cuento, sino un salón de baile roto, saturado de humo, cenizas, basura emocional y recuerdos que hieren. El Rey baila twist, grita, vomita, se arrastra por el suelo con sus tres dedos deformes, y arrastra con él los fragmentos de un imperio familiar que ha hecho trizas. Su Bufón —a veces Kent, a veces conciencia, a veces sombra— lo acompaña en este viaje tragicómico donde cada risa lleva una herida y cada gesto revela la fragilidad de una autoridad perdida.
Una obra profunda, ferozmente poética y absolutamente humana, que reflexiona sobre la vejez, el poder, el abandono y la locura con un lenguaje crudo y lírico, lleno de humor negro y belleza desgarrada. Ideal para puestas en escena que busquen conmover, incomodar y celebrar la potencia de la palabra viva.