Se centra en los eventos que rodearon la conspiración y el asesinato de Julio César, el líder romano, por un grupo de senadores, incluyendo a Bruto y Casio. La obra explora temas de poder, ambición, traición y las consecuencias de los actos políticos extremos. A medida que la trama se desarrolla, se cuestiona la moralidad de los conspiradores y sus motivaciones.