La trama gira en torno a el director de la obra, el Dr Hinkfuss, llama a los actores a improvisar, es decir a tomar el texto original tan sólo como una simple guía a partir de la cual se desarrolla la “verdadera” obra, producto de su propia imaginación. El Dr Hinkfuss, sostiene que el texto original, como toda obra ya escrita, ósea, conclusa representa una construcción inerte, la cual sólo recobra vida al ser actuada y reinterpretada por alguien.
Una vez más, el teatro sobrepasa la frontera del escenario, y se cuela en la propia vida. O, más bien, es la vida la que sube al escenario en una improvisación ajena a los actores y al papel que representan. Sin embargo, todo está planeado, escrito por Pirandello. Entonces, ¿Es real la improvisación? Los actores, se resisten inicialmente a ponerla en práctica, más luego de superar sus convencionalismos, logran desarrollar una improvisada y exitosa representación.