En el corazón de París, donde la elegancia y el ingenio parecen dictar el valor de las personas, dos jóvenes provincianas, Madelón y Cathos, buscan algo más que simples maridos: anhelan vivir dentro de las páginas de una novela romántica. Educadas en la pomposidad de la literatura preciosista, desprecian todo lo que huela a lo cotidiano, incluso a los hombres reales que les ofrecen un matrimonio honesto.
Pero cuando el amor propio de dos pretendientes despreciados se une con el espíritu burlón del teatro, comienza un juego de apariencias que pronto envolverá a todos. Criados que se hacen pasar por nobles, galanterías absurdas, plumas que valen oro y versos improvisados… todo en un torbellino de afectación y ridiculez que explota en carcajadas y reflexiones sobre la falsa nobleza, el amor y la identidad.
Las preciosas ridículas es una joya del teatro clásico que retrata con finísimo humor la obsesión por el estatus, la imitación de las élites y el vacío detrás del exceso de forma sin contenido. Una sátira aguda que, más allá de su época, sigue cuestionando nuestras máscaras sociales. Perfecta para quienes aman el humor inteligente, los giros teatrales y los personajes que se creen más de lo que son.