En el salón de la casa burguesa Palegari se discute sobre un altercado que tuvo lugar el día anterior entre Doro Palegari y Francesco Savio acerca de una actriz, Delia Morello por la que se ha suicidado un joven pintor, Giorgio Salvi, quien en la víspera de la boda fue traicionado por la mujer, que comenzó una relación con Michele Rocca, que a su vez iba a casarse con la hermana del pintor.
En el altercado Doro Palegari asumió la defensa de la mujer, mientras que Savio ha defendido los motivos del hombre. Ahora Doro parece próxima a reconocer que, de hecho, tenía razón Savio. Pero éste dice ahora lo contrario. Este cambio de opinión irrita a Doro, que termina insultando gravemente a su interlocutor. En definitiva, se intercambian posiciones, cuando aparece la popia Delia Morello, agradeciendo a Palegari por defenderla, pese a mostrar cierto remordimiento por lo sucedido.
Desciende y vuelve a lavantarse el telón mostrando una parte del pasillo que conduce a los placos de platea; el escenario, sin embargo, sigue siendo el espacio total del teatro con comentarios de falsos espectadores y críticos: la discusión deriva en la circunstancia de que la obra se basa en un hecho real de crónica negra, apareciendo los dos protagonistas reales de la historia, escandalizados al verse caricaturizados en una comedia.
El segundo acto se desarrolla en la casa de Savio que se prepara para batirse en duelo por la ofensa recibida, pero de repente llega Delia Morello, en un intento de evitar el choque e incluso Michele Rocca, su amante, que quiere agradecer a Savio por haberlo defendido frente a Palegari. Morello y Rocca en cuanto se ven, se abrazan alocadamente y se alejan en una sorprendente fiebre de pasión.
Aumentan los rumores entre los espectadores, al tiempo que llegan de nuevo los personajes de la verdadera crónica, que discuten con los actores, por la forma en que los han representado, aunque finalmente terminan comportándose de manera muy similar.
El primer actor y la primera actriz, a su vez ofendidos, se niegan a seguir actuando y le comunican al director de escena que no habrá un tercer acto.